viernes, 17 de abril de 2015

DOCE

Quisiera poder trocar
en risas tus lamentos...
y escuchar tu corazón
llevado por el viento...

Quisiera poder besarte
hasta perder el aliento...
y acariciarte con calma
como si fuera un cuento...

Quisiera poder hundirme
en tus ojos marrones...
y salir a la superficie
en el valle entre tus senos...

Quisiera poder abrazarte
más allá del tiempo...
y perderme en los zarcillos
de tu rebelde melena...

Quisiera poder contarte
de amor mil y un cuentos...
y escribir sobre tu piel
una nube de versos...

Quisiera poder decirte
hasta qué punto te quiero...
y despertar a tu lado
como si fuera un cuento...

Quisiera poder quitarte
a enamorarte el miedo...
y borrar de tu alma
tantos antiguos miedos...

Quisiera poder olvidar
la distancia y el tiempo...
y descubrir en tus ojos
los mismos sueños...

Quisiera tantas cosas...
Quisiera tantos sueños...
y tenerte entre mis brazos
y soñar mundos enteros...

139. LA SOMBRA DE SUS MANOS

Manos que sueñan, que acarician, que besan, observan, bailan, hechizan, flotan en el aire, prometen infinitos... Y ella, ella... No se da ni...