lunes, 20 de julio de 2015

DIECINUEVE...


Me equivocaba al pensar
Que podría vivir un día más
Sin su argentina risa,
Lejos de su sonrisa
Y sin escuchar su voz...

Ahora que la perdí
En los marasmos del tiempo
Noto que no puedo
Seguir adelante
Ni mirar atrás...

Cuando el espacio
Se convierte en barrera
El tiempo deja de importar
Y solo queda el vacio
Corazón de poeta...

Esas extrañas ganas
De llorar por un sueño
Cuando se esfuma
La última ilusión
Del postrero amor...

Corazón, tú que lates
Desaforado en mi pecho...
Podrías vivir sin ella?
Mas ni siquiera lo intento...
Pues por ella muero y vivo...

sábado, 18 de julio de 2015

DIECIOCHO


Esa extraña sensación
cuando el tiempo
como la arena
se escurre
entre tus dedos...
Esa añoranza
de besos imposibles,
de abrazos lejanos,
de sueños vanos
pero compartidos...
Cuando tienes ganas
de llorar y te aguantas
por el qué dirán,
pues te sientes
tan vacío...
Aquella mirada
su voz que te hechiza,
su recuerdo te persigue,
la añoranza de lo que
pudo haber sido...
Y la realidad
que te acecha
tras la esquina...
Y te va rompiendo
poquito a poco...
Solo quedan
un puñadito de versos,
nacidos para ella,
entre lunas y estrellas,
de la inmensa noche...

139. LA SOMBRA DE SUS MANOS

Manos que sueñan, que acarician, que besan, observan, bailan, hechizan, flotan en el aire, prometen infinitos... Y ella, ella... No se da ni...