Los besos que no nos dimos
me queman los labios y el alma...
Mis manos están huérfanas
de tus caricias de niña mala...
Toda la piel de mi cuerpo
te llama en la distancia...
Incluso mi mente torturada grita
tu nombre en la oscuridad...
Las palabras que nunca te dije
rompen de mi corazón las murallas...
Y los sentimientos poco convenientes
aúllan en el fondo de mi garganta...
Amor de juventud que regresa
con fuerza a presentar batalla...
Cuatro noches de incienso y velas,
sin caricias ni besos, solo palabras y miradas...
¡Cuánto quisiera poder hundirme
en tus ojos hasta el alba!
¡Qué no daría por besar la miel
de tus labios, la sal de tu cuerpo!
Y yo, curtido en cien mil batallas
arrío una vez más ante tí bandera blanca...
Y confieso mi amor, mi desesperación
por no ser yo a quien tú amas...
Como amigo fiel, regresaré a las sombras,
tan lejos de la luz de tu mirada...
Pero no puedo evitar buscarte en sueños
y besarte con dulzura en la madrugada...
... al final, regreso a la poesía... aunque no sea demasiado buena... aunque a veces me parezca incluso un poco falsa... porque me quedé enganchado en las marañas de la prosa... pero sobre todo, porque disfruto escribiendo poesía... y compartiéndola contigo...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
140. UN REGRESO INESPERADO
Poemas que se elevan en el viento y alcanzan los cielos de madrugada. Palabras que surgen en la punta de los dedos, y encuentran su camino s...
-
Me pides, melosa, que te escriba una historia alegre, de dragones comprensivos torturados por princesas, que les hacen cosquillas en la bar...
-
Soy el amigo fiel, el consejero, el guardián de tus sueños, el paño de lágrimas, el que te espera, quien te escucha, el cómplice de tus ...
-
Sueño con tus labios, con tu sonrisa, con tu cuerpo... El recuerdo se transforma en pesadilla, pues no queda casi nada de ti, donde yo esto...
No hay comentarios:
Publicar un comentario