La luz vela tu rostro, y tus ojos se cierran,
y la sombra de una lágrima resbala por tu mejilla...
¡Qué tormento, verte sufrir, de esa manera!
Quisiera poder sentarme a tu lado, suavemente,
y pasar mi brazo sobre tus hombros, como antes,
que notases el calor de mi cuerpo, en el alma...
Moriría por beber, otra vez, tus dulces lágrimas,
y besar tus cárdenos labios o tu pícara nariz...
Mataría por sentir la cálida piel de tu cuello...
Saborear, una vez más, el sudor entre tus senos,
y recorrerlos, pequeños y prietos, con la lengua,
y seguir bajando, por todo tu enjuto cuerpo...
Amarte no fue una elección... no tenía alternativa...
Pocos meses de amor, me temo. Catorce y medio...
Lo eterno, llegó a su fin, con mi muerte...
En el fondo, no me extraña: demasiado tiempo...
buscándote... soñándote... esperándote...
y mi pobre corazón no supo aceptar... la felicidad...
Morir no es tan difícil…Lo malo es el olvido...
Pocas cosas más difíciles que olvidar un amor...
Si hay una luz, al final del túnel, no la he seguido...
Porque tu amor era lo que me daba la vida...
y por eso, prefiero seguir siempre contigo...
convirtiéndome en tu enamorado fantasma...
Verte sufrir, y no poder abrazarte, ni besarte...
saber que estás llorando por mí, y no consolarte...
puesto que murió mi cuerpo, pero no mi amor...
Que la luz del sol te acaricie y seque tus lágrimas,
que la brisa del amanecer sean mis besos...
y las hojas de los árboles te susurren mi amor...
y la sombra de una lágrima resbala por tu mejilla...
¡Qué tormento, verte sufrir, de esa manera!
Quisiera poder sentarme a tu lado, suavemente,
y pasar mi brazo sobre tus hombros, como antes,
que notases el calor de mi cuerpo, en el alma...
Moriría por beber, otra vez, tus dulces lágrimas,
y besar tus cárdenos labios o tu pícara nariz...
Mataría por sentir la cálida piel de tu cuello...
Saborear, una vez más, el sudor entre tus senos,
y recorrerlos, pequeños y prietos, con la lengua,
y seguir bajando, por todo tu enjuto cuerpo...
Amarte no fue una elección... no tenía alternativa...
Pocos meses de amor, me temo. Catorce y medio...
Lo eterno, llegó a su fin, con mi muerte...
En el fondo, no me extraña: demasiado tiempo...
buscándote... soñándote... esperándote...
y mi pobre corazón no supo aceptar... la felicidad...
Morir no es tan difícil…Lo malo es el olvido...
Pocas cosas más difíciles que olvidar un amor...
Si hay una luz, al final del túnel, no la he seguido...
Porque tu amor era lo que me daba la vida...
y por eso, prefiero seguir siempre contigo...
convirtiéndome en tu enamorado fantasma...
Verte sufrir, y no poder abrazarte, ni besarte...
saber que estás llorando por mí, y no consolarte...
puesto que murió mi cuerpo, pero no mi amor...
Que la luz del sol te acaricie y seque tus lágrimas,
que la brisa del amanecer sean mis besos...
y las hojas de los árboles te susurren mi amor...
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