Hoy me desperté con un grito en la garganta,
recorriendo eternos pasillos durante toda la noche,
y buscando entre recuerdos olvidados,
el de un momento, cuando no la hubiera amado...
¿Desde cuántos años nos conocemos, amiga mía?
Más de treinta, noche y día, y de madrugada,
cuando el cansancio y la tristeza rebajan los muros
de la realidad, y surge el contacto de los mundos...
En la lucha por seguir adelante, nace un día...
una presencia, sentimiento, necesidad... amar...
Amar y ser amado, algo simple y complicado...
un eterno deseo, que puede llevarte toda la vida...
Y se va formando en tu interior un "bezoar",
extraña agrupación de elementos muy distintos,
en tu cuerpo, casi siempre en los intestinos...
salvo que el mío está formado por sentimientos...
Y en torno a aquél primer sentimiento reprimido,
aquella emoción no compartida, va creciendo,
en el corazón, un "bezoar"... y sube la tensión...
y duele el corazón... tanto, que parece estallar...
La vieja y esquiva garra de acero, que aprieta,
comprime, condensa y da forma a la piedra...
y convierte los sentimientos en materia...
tanto, que no entiendes que no se vea con rayos X...
recorriendo eternos pasillos durante toda la noche,
y buscando entre recuerdos olvidados,
el de un momento, cuando no la hubiera amado...
¿Desde cuántos años nos conocemos, amiga mía?
Más de treinta, noche y día, y de madrugada,
cuando el cansancio y la tristeza rebajan los muros
de la realidad, y surge el contacto de los mundos...
En la lucha por seguir adelante, nace un día...
una presencia, sentimiento, necesidad... amar...
Amar y ser amado, algo simple y complicado...
un eterno deseo, que puede llevarte toda la vida...
Y se va formando en tu interior un "bezoar",
extraña agrupación de elementos muy distintos,
en tu cuerpo, casi siempre en los intestinos...
salvo que el mío está formado por sentimientos...
Y en torno a aquél primer sentimiento reprimido,
aquella emoción no compartida, va creciendo,
en el corazón, un "bezoar"... y sube la tensión...
y duele el corazón... tanto, que parece estallar...
La vieja y esquiva garra de acero, que aprieta,
comprime, condensa y da forma a la piedra...
y convierte los sentimientos en materia...
tanto, que no entiendes que no se vea con rayos X...
A falta de una amada mortal, llenas el corazón
con pequeños momentos robados al tiempo...
mil recuerdos de grandes y pequeñas amigas,
con pequeños momentos robados al tiempo...
mil recuerdos de grandes y pequeñas amigas,
que te han ido acompañando en el caminar...
Pasan los años, y las décadas, y por fin...
la encuentras... que los caminos del amor ...
son inescrutables, arduos, y tortuosos...
Y piensas que con ella desaparecerá el dolor...
la encuentras... que los caminos del amor ...
son inescrutables, arduos, y tortuosos...
Y piensas que con ella desaparecerá el dolor...
Pero no es así... el "bezoar" sigue creciendo...
las emociones, los sentimientos reprimidos,
demasiados sueños, y tristes realidades,
se acumulan en torno a esa piedra del corazón...
¿Será que mi necesidad de amar sigue creciendo?
¿Que nunca tendré bastante con la realidad?
Quizás por eso, me hundí en los mundos de tinta,
decidido a sentir, compartir, vivir y soñar...
Pero llegó el momento en el cual se partió,
con un siniestro crujido, la piedra del "bezoar"...
y de miles de sentimientos jamás vividos...
nació ella... mi amada y esquiva musa...
Criatura imaginaria, como en todos los poetas,
a quien vas dotando de todas aquellas virtudes
de todas las mujeres que has ido conociendo
a lo largo de muchos años de vida...
Y quizás por eso, por no existir ni ser real...
pero aglutinar tantas facetas hermosas...
de tantas mujeres que han dejado huella en ti...
Mi amada y esquiva musa, perfecta fusión,
implacable compañera y mortal acicate...
las emociones, los sentimientos reprimidos,
demasiados sueños, y tristes realidades,
se acumulan en torno a esa piedra del corazón...
¿Será que mi necesidad de amar sigue creciendo?
¿Que nunca tendré bastante con la realidad?
Quizás por eso, me hundí en los mundos de tinta,
decidido a sentir, compartir, vivir y soñar...
Pero llegó el momento en el cual se partió,
con un siniestro crujido, la piedra del "bezoar"...
y de miles de sentimientos jamás vividos...
nació ella... mi amada y esquiva musa...
Criatura imaginaria, como en todos los poetas,
a quien vas dotando de todas aquellas virtudes
de todas las mujeres que has ido conociendo
a lo largo de muchos años de vida...
Y quizás por eso, por no existir ni ser real...
pero aglutinar tantas facetas hermosas...
de tantas mujeres que han dejado huella en ti...
Mi amada y esquiva musa, perfecta fusión,
implacable compañera y mortal acicate...
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