Necesito creer...
que mi vida quiere decir algo...
que todo irá mejor, un día...
que no hay esfuerzo sin recompensa...
que los "buenos" ganan, a veces...
que los "malos" son castigados...
que el "bien" y el "mal" existen...
que no he desperdiciado mi tiempo...
que el amor durará para siempre...
que la enfermedad es hija del azar...
que podemos manipular el destino...
que ninguna pregunta quedará sin respuesta...
que alguien conoce la verdad...
que no he perdido la gran batalla...
que el tiempo de las caricias volverá, un día...
que la voz de los muertos se hará escuchar...
que los besos no morirán en mis labios...
que la ilusión me permitirá revivir cada mañana...
que encontraré la fuerza del amor infinito...
que me dejaré llevar por la magia de lo minúsculo...
que habrá siempre un arcoíris en mi corazón...
que el canto de los pájaros se quedará en mi alma...
que el olor de las rosas llenará mis pulmones...
que la risa de los niños permanecerá en mi memoria...
que el mar y los océanos seguirán con su canción eterna...
que el último día, miraré al pasado sin rencor...
que moriré, sin sufrimiento, antes que mis hijos...
que estaré acompañado por mi familia....
que no terminaré en un asilo anónimo...
... Mas sobre todo, necesito saber...
... que no habrá más muerte después de esta vida...
... ni más vida después de esta muerte...
... al final, regreso a la poesía... aunque no sea demasiado buena... aunque a veces me parezca incluso un poco falsa... porque me quedé enganchado en las marañas de la prosa... pero sobre todo, porque disfruto escribiendo poesía... y compartiéndola contigo...
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140. UN REGRESO INESPERADO
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Manos que sueñan, que acarician, que besan, observan, bailan, hechizan, flotan en el aire, prometen infinitos... Y ella, ella... No se da ni...
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