Soy como el cachorrito que se enrosca,
fiel y amable, en las piernas de su amo,
todo amor, todo ternura, todo paciencia,
el amigo que todo lo sabe, pero que calla.
Poco pide, alguna caricia de vez en cuando,
un poco de comida, palabras amables,
amor incondicional e infinita paciencia,
siempre listo para un paseo o un juego.
Voy buscándote por los rincones del mundo,
siguiendo el rastro de tu voz, de tu sonrisa,
no concibo sonido más bello que tus risas,
ni mayor tristeza que tus silencios.
Besarte, en el fondo, poco más pido,
sentir tu mano entre las mías,
la tibieza de tu cuerpo al pasear,
y hundirme en tus ojos marrones.
Pero me conformo con escribirte poemas,
que solamente leerás con el tiempo,
mientras voy liberando mi mente
de las penas del corazón solitario.
... al final, regreso a la poesía... aunque no sea demasiado buena... aunque a veces me parezca incluso un poco falsa... porque me quedé enganchado en las marañas de la prosa... pero sobre todo, porque disfruto escribiendo poesía... y compartiéndola contigo...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
140. UN REGRESO INESPERADO
Poemas que se elevan en el viento y alcanzan los cielos de madrugada. Palabras que surgen en la punta de los dedos, y encuentran su camino s...
-
Me pides, melosa, que te escriba una historia alegre, de dragones comprensivos torturados por princesas, que les hacen cosquillas en la bar...
-
Soy el amigo fiel, el consejero, el guardián de tus sueños, el paño de lágrimas, el que te espera, quien te escucha, el cómplice de tus ...
-
Sueño con tus labios, con tu sonrisa, con tu cuerpo... El recuerdo se transforma en pesadilla, pues no queda casi nada de ti, donde yo esto...
No hay comentarios:
Publicar un comentario